Todo por el deporte

Un proyecto para la educación de las niñas

En 2005, Tina Kieffer creó la asociación Todas a la escuela Esta asociación ha construido una escuela para niñas de familias desfavorecidas. La educación de las niñas es un grave problema en Camboya. Muchas de ellas se ven obligadas a trabajar desde muy pequeñas para mantener a sus familias, lo que las mantiene alejadas de la escuela.

La escuela Happy Chandara ofrece una educación de calidad, que incluye cursos de inglés, francés e informática. También hace mucho hincapié en el desarrollo personal, la conciencia cultural, el deporte y la creatividad. Hoy, la escuela acompaña a más de 1.400 chicas hasta que consiguen su primer empleo.

Dentro de Happy Chandara, el deporte es una palanca que actúa tanto sobre la salud de las niñas como sobre el desarrollo de sus aptitudes. Así pues, la Fundación Decathlon se enorgullece de haber apoyado la construcción de un campo de deportes dentro de la propia escuela Happy Chandara, lo que ha permitido a más de 1000 niñas descubrir los beneficios del deporte.

Con ocasión de la inauguración del campo, tuvimos el placer de asistir a una demostración de taekwondo, baloncesto y juegos deportivos, practicados regularmente por las jóvenes de la escuela. A este respecto, nos enteramos de que una de las alumnas de Happy Chandara quedó tercera en el famoso maratón de Angkor.

Anne-Céline Prigent, ex decatleta y Directora de Comunicación de la Escuela Happy Chandara

"Como antigua atleta de Decathlon, gran aficionada a la equitación y madre de dos niñas de 8 y 5 años, estoy muy implicada por razones personales y profesionales con Decathlon y HCS. Este proyecto me interesa especialmente, ya que me gustaría transmitir a las niñas el mensaje de que, gracias a los valores del deporte, pueden llegar a ser lo que quieran.

Estamos en el siglo XXI, pero con demasiada frecuencia las mujeres siguen encontrando obstáculos en el camino hacia la emancipación. El deporte es uno de los vectores que pueden ayudarnos a saltar estos últimos obstáculos, y creo que los modelos de conducta pueden ser una palanca formidable. El deporte me ha ayudado sin duda a ganar confianza en mí misma, a poner a prueba mis límites y a medirme con los demás. Es una buena escuela de superación, de cambio y de agilidad. Hoy, gracias a este proyecto de la escuela Happy Chandara, me gustaría transmitir estos valores a niños y niñas de entornos desfavorecidos.

También creo que la educación física y el deporte son una parte esencial de la educación de calidad, y deben desarrollarse en las escuelas, especialmente ahora con Covid-19".

Los equipos de Decathlon Camboya desempeñan un papel clave en el apoyo a estas jóvenes. La donación de material deportivo, la organización de eventos deportivos en la escuela y el apoyo profesional a las alumnas son sus principales acciones. Queremos dar las gracias a los equipos locales de Decathlon Camboya por su inversión, así como a la asociación Toutes à l'école por este impactante proyecto.